15 de abril de 2013

Internet y la construcción de la identidad humana

Breve análisis de la influencia de Internet sobre la construcción de la identidad humana, los alcances de la misma y los cambios que ha generado en la forma de comunicarse con los demás. Internet es una herramienta de intercambio de información, pero a su vez, es creador de identidades virtuales.



La construcción de la identidad de una persona ha cambiado notablemente a partir del surgimiento de Internet. La posibilidad que ella genera de "jugar a ser otro" tiene una gran incidencia en la conducta y en las relaciones humanas.

Vincularse a través de este medio ha dado como resultado encontrarse con personas que buscan aceptación, opiniones múltiples y nuevos espacios simbólicos de encuentro.

A raíz del avance tecnológico, Internet se ha convertido en una "red de redes" ocupando un lugar significativo en la vida de los usuarios y no usuarios. Su uso se ha transformado en imprescindible para la comunicación, las creaciones artísticas, los negocios y tantas otras actividades.

Cuando hablamos de identidad, nos estamos refiriendo al conjunto de rasgos que diferencian a una persona de otra y que implica una vinculación con un "otro".

Un nuevo concepto ha sido introducido a partir de esta construcción nueva y es la de "Computadora Subjetiva", noción que considera al ordenador, además de sus funciones conocidas, como "modificador" de la manera en que los hombres se piensan a sí mismos y a los demás.



internet
Internet e Identidad


A través de diversos portales como Facebook, Twitter, Linkedin, blogs personales o foros, el usuario tiene a disposición distintos recursos para crear un perfil de autodescripción personal, donde gustos, preferencias culturales, académicas y laborales, quedan plasmadas en la red, creando de esta forma, un perfil con ciertos rasgos determinados.

A partir de esto, aparece un portal de presentación de sí mismo que lo define como sujeto social y le permite establecer similitudes o diferencias con respeto a otros usuarios.

La exposición y la posibilidad de autoexpresión es muy amplia: hoy en día todo queda al servicio de un público universal que tiene acceso a gran caudal de información.

Del mismo modo, el anonimato permite jugar a ser "un otro" sintiendo mayor libertad para expresarse en relación a diversos temas. Este hecho ha creado una multiplicación de voces promoviendo la construcción de un "yo colectivo polifónico".

Sin dudas, Internet ha abierto un sinfín de posibilidades que crece día a día.